Drenaje linfático

El cuerpo alcanza su equilibrio ideal cuando la regulación de líquidos funciona correctamente.

El cuerpo humano está compuesto en dos tercios por líquido.
Este líquido se encuentra dentro y alrededor de todas las células del cuerpo, en el torrente sanguíneo, en los vasos linfáticos y en los conductos cerebrales. Muchos procesos esenciales del cuerpo se desarrollan a través de estos líquidos corporales. A este conjunto de procesos lo llamamos equilibrio hídrico.

El cuerpo se encuentra en un equilibrio óptimo cuando el equilibrio hídrico está en condiciones ideales.

El sistema linfático (vasos y ganglios linfáticos) juega un papel fundamental en la creación y el mantenimiento del entorno ideal para nuestras células. Es el sistema linfático el que cumple una función nutritiva, purificadora y de drenaje en ese entorno.

La circulación linfática es una función natural y esencial en nuestro cuerpo. Sin embargo, esta función puede verse afectada por un accidente, una enfermedad o el estrés. En estos casos, el drenaje linfático puede ayudar a restaurar la función normal del sistema linfático, ya sea de forma manual (con las manos) o mediante dispositivos de compresión.

El drenaje linfático es un tratamiento que apoya la eliminación del exceso de líquido linfático cuando el cuerpo por sí solo no es capaz de hacerlo.